TAPAS Y GASTRONOMÍA EN LA CIUDAD

 León no es la única ciudad donde se sirven tapas, pero sí es una de las pocas donde se ofrecen sin costo adicional. Por ello, las tapas se han convertido en una seña de identidad de la generosa tradición leonesa: por cada vino, caña, corto, chato o mosto, los hosteleros de la ciudad obsequian con una pequeña excelencia gastronómica que va desde algún producto típico a alguna refinada creación de gourmet.

El laberíntico corazón medieval de la ciudad recibe su nombre por la abundancia de mesones típicos en los que degustar un buen vino y las famosas tapas de León. Sus pequeñas callejuelas invitan a perderse y disfrutar de los muchísimos bares que se concentran en esta zona. Después de la cena, el Húmedo se convierte también en la zona de marcha por excelencia, con pubs temáticos para todos los gustos.

Entre el parque del Cid y la colegiata de San Isidoro, bares y mesones tradicionales se entremezclan con viejas librerías, tiendas de arte y otros comercios tradicionales que respiran poesía. Y es que esta zona es uno de los enclaves urbanos que, anualmente, aportan la fantasía de su trazado para la realización de un recorrido literario que se lleva a cabo durante las Fiestas de San Juan y San Pedro, un acto lírico que añade más colorido, si cabe, a un barrio plagado de cultura.

Al noroeste del centro histórico, en torno al Auditorio Ciudad de León, el Musac y la nueva sede de la Junta de Castilla y León, ha nacido un espacio moderno: Eras de Renueva. Sus calles espaciosas, sus bulevares arbolados y sus edificios modernos acogen un amplio repertorio de establecimientos hosteleros donde la calidad y la innovación son sus principales características.

Coincidiendo con las distintas festividades leonesas, especialmente en Semana Santa y en la semana grande, la ciudad celebra la “Feria de la tapa”, concurso gastronómico que premia el sabor, la excelencia y la innovación de los hosteleros leoneses, y que revitaliza la tradición del tapeo en la ciudad.

Origen difuso

No es claro el origen del término “tapa” para referirse a la vianda que acompaña a la bebida: algunos sostienen que solía taparse el vaso de vino con pan o jamón para evitar que entraran agentes externos; y otros sostienen que la comida “tapaba” los efectos del alcohol.