Por derecho propio, el Camino de Santiago es una piedra angular en la memoria colectiva leonesa. A lo largo de los siglos, la capital ha presenciado el eterno trasiego jacobeo protagonizado por unos peregrinos que, en opinión de Goethe, construyeron Europa mientras se dirigían a la tumba del Apóstol en Compostela. La antiquísima ruta de las estrellas está llena de mitos y de sentimientos indescriptibles.
Y León, fiel a su legado milenario de hospitalidad, cuenta con suficientes alojamientos y otras atenciones pensadas para los viajeros.