Los peregrinos abandonaremos Villafranca dejando atrás la monumental calle del Agua para llegar al puente sobre el río Burbia, desde el que se vislumbran unas inmejorables vistas de la arquitectura tradicional y privilegiada ubicación de la Villa.
Desde este punto, hasta Pereje, distan 5 kilómetros, que nos llevarán siguiendo el curso del río Valcárcel a través de la vieja carretera nacional VI, a la misma vera del río, hasta el cruce donde veremos frente a nosotros el muro de la Autovía-V y el andadero por el cual hemos de seguir y que nos llevará hasta Pereje.
Este camino no tiene pérdida, simplemente hay que seguir la antigua vía por su margen izquierda, la cual está protegida por un murete de hormigón.
Este camino se abandona para desviarse a la derecha, cruzando la N-VI, hacia la entrada a Pereje, entre viejos castaños centenarios cubiertos de frondosa vegetación.
Para salir de Pereje, atravesaremos la población y retomaremos el carril peatonal para recorrer cuatro kilómetros y medio hasta la siguiente localidad, Trabadelo.
A un kilómetro y medio aproximadamente, encontraremos el área de descanso de la siguiente localidad del Camino, y a un kilómetro más adelante, la desviación a hacia Trabadelo,
Escoltados por un paisaje de chopos y robles, abandonamos la localidad de Trabadelo caminando por una pista asfaltada, por encima de la nacional. Más adelante sortearemos un arroyo que alimenta al río Valcarce para volver de nuevo al carril peatonal protegido por un muro, y que se encuentra al borde de la N-VI.
Tras un kilómetro y medio de carril alcanzamos La Portela de Valcarce.
Dejamos La Portela por la N-VI y a escasos 300 metros, tomaremos el desvío hacia la izquierda, por otra carretera comarcal mucho más tranquila que la que hemos abandonado y que nos conducirá, tras recorrer tan solo un kilómetro a Ambasmestas.
Para llegar hasta la siguiente localidad, Vega de Valcarce, avanzaremos por la misma carretera que tomamos para llegar a Ambasmestas, durante un kilómetro, entre prados y bosques.
Para seguir nuestro Camino hasta Ruitelán, abandonaremos Vega de Valcarce por la carretera antigua que nos ha acompañado desde Ambasmestas.
Hasta el momento de abandonar Vega, nuestro recorrido se ha presentado complaciente y cómodo, pero la famosa subida al Cebreiro ya la tenemos cerca, por la que debemos estar preparados.
Hasta Ruitelán solo tenemos dos kilómetros de marcha a la vera del río Valcarce, senda desde la que divisaremos en el alto de un cerro el famoso castillo de Sarracín.
Seguiremos adelante, pasado Ruitelán en dirección a las Herrerías, para, justo a la salida del pueblo encontrarnos una pequeña pendiente para coger, poco después, un desvío hacia la izquierda, que en continuo descenso nos llevará hasta nuestra siguiente parada, no sin antes cruzar un antiguo puente de piedra para sortear el río Valcerce.
Para comenzar la verdadera subida del Cebreiro cruzaremos Las Herrerías y el Barrio de Hospital, tras lo cual una fuerte subida, por asfalto, nos incitará a tomarnos este tramo con calma y acortar los pasos para no agotarnos.
Ya en plena subida, los peregrinos a pie deberemos tomar la senda que nace a la izquierda de la pista asfaltada, mientras que los ciclistas deberán continuar de frente, por la carretera.
Los peregrinos a pie llegaremos a una senda que podemos tildar de traicionera ya que se allana para cruzar el arroyo de Refoxo, pero que pronto se convierte, de nuevo en una fuerte subida hasta La Faba. Este camino empedrado que vamos a iniciar es una calzada romana -atunelada- con frondosa vegetación.
Castaños, robles y paisajes increíbles serán los testigos de nuestro esfuerzo a lo largo de los 4 kilómetros que dura nuestro ascenso hasta La Faba.
Abandonamos La Faba para alcanzar el último pueblo de la provincia de León en el Camino Francés, La Laguna.
El paisaje deja la sombra de los castaños, para abrirse a un terreno de pastizales y monte bajo en una pendiente mucho más suave roturada por el desnivel del monte con grandes lachas de piedra, de la que hemos recorrido hasta el momento.
Tras dos kilómetros de recorrido, los peregrinos encontraremos en último albergue de León en La Laguna.
A unos 700 metros de La Laguna aparece el primer mojón jacobeo con señalización de distancias. Se trata del 152,5, y lleva la inscripción Os Santos. Avanzaremos cuatrocientos metros más para despedirnos de León. Abandonaremos las tierras leonesas, la provincia con más kilómetros de recorrido del Camino Francés 214,4 kilómetros, para pisar, por primera vez tierras gallegas.