Poseen la Cordillera Cantábrica en general, y el Valle de Laciana en particular, una riqueza fósil e historia geológica sorprendente, que atrae a muchos expertos de múltiples sitios. Un patrimonio que incluye múltiples Lugares de Interés Geológico (LIG), reconocidos así por sus singulares características: en enclave como el Feixolín con sus rocas de origen ígneo, o en las diversas formaciones provocadas por glaciares tales como las del valle de Lumajo o el Pico Muxivén.
En las antiguas Escuelas de Robles de Laciana se ha creado esta colección de fósiles que evidencian la vida en el pasado y su evolución. Podremos ver en él múltiples piezas procedentes de la cuenca carbonífera de Villablino, que sobresale por su abundancia de fósiles de plantas, en un envidiable estado de conservación.
Las diversas salas de sus 300 metros cuadrados incluyen: 1) una exhibición de minerales permanente, con una colección proveniente de todo el mundo que incluye muchos ejemplos de fascinantes rocas; 2) una sala de fósiles de León y nacionales, con múltiples muestras de flora fósil; 3) una sala de exposiciones temporales de temas misceláneos. Sus instalaciones también incluyen una sala de medios audiovisuales y una zona ajardinada, todas ellas con accesos adaptados para personas con movilidad reducida.
Desde el Aula Geológica así mismo se da divulgación sobre muchas de las áreas del territorio de Laciana, mediante rutas didácticas. También, en la primera semana de julio se organizan unas Jornadas “Geolaciana” en torno a estas temáticas, y se edita una revista gratuita sobre ellas, disponible en su web. Para visitar la Colección, se recomienda concertar las visitas con varios días antelación.
Podemos acceder a Robles de Laciana desde Villablino (a 7 Km) o desde La Magdalena por la AP-66 y CL-626 (situada a unos 60 kilómetros).