Esta capilla, situada en la Calle de las Angustias, muy próxima a la Iglesia del Salvador, es sede de la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad, fundada en 1615, con el fin de prestar cuidado a enfermos.
En su interior, además de una imagen de Las Angustias de Luis de Vena datada en 1600, guarda destacadas pinturas sobre la Pasión del siglo XVII, así como los pasos que esta hermandad procesiona durante la Semana Santa bañezana, un Cristo Yacente, el Descendimiento y la Soledad.
El retablo mayor de esta pequeña capilla, donde se encuentra la imagen de Las Angustias, es obra de Francisco Rivera y está realizado en madera dorada y policromada del siglo XVII.
Pero si por algo son conocidas, esta capilla y la Cofradía, es por la imagen del Santo Potajero, ligada a la celebración del mismo nombre cuyos orígenes se pierden siglos atrás.
La fiesta del Santo Potajero, declarada de Interés Turístico Provincial, se celebra en la Bañeza cada Miércoles Santo por la mañana desde tiempos inmemoriables y consiste en la preparación y reparto gratuito de un tradicional potaje acompañado de una tajada de bacalao, pan, una pasta y una naranja, a todo aquel que se acerque hasta la capilla con una cazuela.
Fue esta una comida de caridad que la Cofradía ofrecía a los pobres de solemnidad, pero con el paso del tiempo se ha convertido en una fiesta popular a la que acuden centenares de personas de todas las condiciones sociales en busca de la cazuela de garbanzos con arroz y bacalao.
Esta capilla se puede visitar de forma gratuita de lunes a viernes de 11:00 a 13 horas.